Como si
apoyara nuestra posición al respecto, el artículo de Escobar, G. (1992). Tomado
de La Profesión desde la Ética, enfatiza la dignidad humana, la vocación y el
servicio, la búsqueda del perfeccionamiento y la justa obtención de una retribución no solo económica
a cambio del ejercicio de la labor profesional.
En
particular el que mencione el papel de la conciencia en el ejercicio
profesional, en el cual se refleja claramente el sentido
utilitarista que la
sociedad de consumo, la
ignorancia de los
profesionales acerca de
los deberes morales
en su profesión y la materialización de
la cultura, que no siempre se dan,
precisamente porque no se cumplen las normas morales en cada profesión, ni se
da la concurrencia con las expectativas
sociales acerca del desempeño de las
profesiones en cada sociedad.
Yo
concluiría que a la perfección de los deberes y derechos profesionales, le contribuiría y bastaría con aplicarles la máxima de “trata a los demás como
quisieras que te trataran a ti”, incluso
en estos aspectos que parecerían tan objetivas y hasta impersonales, pero que
por el contrario, los son en grado sumo, si tomamos en cuenta que a la
actividad profesional dedicamos tantas horas de nuestra vida consciente día a día
y a través de toda nuestra existencia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario